Pretender que no estás enfermo

Nunca funciona. Cuando estás enfermo, tienes que cuidarte. Tu cuerpo necesita energía extra para combatir la infección. Si fuerzas a seguir activo durante un resfriado, especialmente si tienes fiebre, perderás todas tus energías. Agravando tus síntomas.

Dormir muy poco

Dormir es la clave para tener un sistema inmune saludable. Una defensa fuerte, ayuda a eliminar los gérmenes de tu cuerpo de manera eficiente. Estudios en este campo han demostrado que dormir menos de siete horas triplica el riesgo de contraer un resfriado. Si tu resfriado te mantiene despierto por las noches, trata de acostarte más temprano o dormir una siesta durante el día.

Fumar

Los fumadores tienden a enfermarse más. Además sus síntomas son peores y más intensos. Tienden a durar mucho más tiempo.

Estresante

Altos niveles de estrés evitan que tu sistema inmune trabaje de manera eficiente. El estrés nos afecta más de lo que te imaginas. Si estas estresado y enfermo a la vez, es muy probable que sufras por más días el mal.

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