Los investigadores de una universidad entrevistaron a 347 pacientes con obesidad que habían pasado dos años trabajando con entrenadores físicos y que además habían sido supervisados por sus médicos.
A los pacientes se les pidió que llenaran una encuesta calificativa donde se indagaba sobre la frecuencia con que su médico explicaba las cosas con claridad, escuchaba cuidadosamente y con respeto, además de tratar de averiguar lo útil que la participación del médico había sido en el proceso. Los pacientes que dieron a sus médicos altas calificaciones habían perdido alrededor de 5 kilos, mientras que los pacientes que dieron malas calificaciones a sus doctores habían perdió solamente de 2 a 3 kilos.
Los investigadores que participaron en el estudio, creen que incorporar a médicos en los programas podría conducir a una pérdida de peso más exitosa en los pacientes. Los médicos pueden influir en el proceso y darnos la inspiración que necesitamos.
Comparando este estudio con otro donde se trataba de que los pacientes dejaran de fumar, los investigadores se dieron cuenta de que si los médicos que tenían una charla, incluso una breve, con los fumadores estos arrojaban mejores resultados. Por eso se cree que es importante usar el mismo enfoque para abordar el problema de obesidad.
Por supuesto, más investigación debe llevarse a cabo sobre este tema, pero es bueno saber que los médicos pueden desempeñar un papel crucial en este tipo de tratamientos