En la actualidad, se recomienda para los niños pasar viendo la tele por un tiempo límite de dos horas diarias, pero este estudio sugiere que ese tiempo es excesivo y se debería de recortar a la mitad. En el estudio, los niños que pasaban dos horas sufrían mas de sobre peso que los que veían menos de una hora. No solo eso además no se encontró mucha diferencia entre los que veían dos horas diarias y los que lo hacían por mas tiempo.
En el estudio el equipo de investigación evaluó los datos de 11,113 niños que asistían al kinder durante el período de 2011-2012. Parte del estudio recopiló información sobre los factores del estilo de vida que podrían afectar el desempeño educativo de un niño, incluyendo el uso de computadora y los hábitos de televisión según lo informado por sus padres. También se midieron la altura y el peso de los estudiantes.
Los investigadores después de un año recogieron la misma información de los mismos niños y descubrieron que había una correlaciones entre los hábitos de ver TV y el peso. Los datos mostraron que los niños que iban al kinder y primero de primaria que veían de 1 a 2 horas o más de televisión al día tenían índices de masa corporal mucho más altos que los que veían TV durante solamente una hora o menos. Los niños que pasaban 60 minutos o más frente a la pantalla tuvieron un 39 por ciento más de probabilidades de tener sobrepeso y un 86 por ciento más de probabilidades de convertirse en obesos. Sin embargo, los investigadores no encontraron una correlación entre el uso de la computadora y el peso, aunque a simple las actividades son parecidas.
Esta investigación no es la primera en este campo. En el pasado ya se han vinculado hábitos fuertes de televisión con personas obesas durante 30 años. Por ejemplo, un estudio publicado en 1985 examinó a niños de 6 a 11 años. La conclusión fue -engordamos a nuestros hijos exponiéndolos al televisor. Y los estudios han encontrado consistentemente una relación positiva entre las horas pasadas delante de la TV y el peso.
Si bien la presente investigación no se concentró en cómo sucede este proceso, estudios previos han indicado que la exposición a los comerciales puede ser un factor. Un equipo de investigadores ha descubierto que prestar atención a los programas de televisión tenía un impacto mucho mayor en el peso que en otros medios de comunicación, como juegos de computadora y videojuegos . Esos investigadores teorizaron que los comerciales pueden influenciar a la preferencia de alimentos azucarados, insalubres. También se sugirió que ver la televisión a un consumo sin sentido de alimentos chatarra.
Otros estudios han encontrado que los niños que tienen un televisor en sus dormitorios son más propensos a tener sobrepeso que aquellos que no tienen. La respuesta es muy simple: Limitar el tiempo de televisión. Parece evidente, pero puede ser más fácil decirlo que hacerlo para muchos padres.