Las formas más seguras y efectivas para perder peso son extremadamente simples y no tienen nada "inseguro". Es básicamente comer un poco menos y mantenerse más activo.
Un buen consejo es revisar la cantidad de calorías que comes normalmente y a partir de ahí bajar la cantidad. Sin embargo, es mejor que lo hagas con la supervisión de un experto y sobre todo que nunca consumas menos de 1,200 calorías al día ya que no es seguro.
Hay que tener cuidado y no exagerar con la reducción de calorías porque se necesitan una cierta cantidad para tener energía durante el día, pensar con claridad, mantener el cuerpo ágil y la mente alerta.
Estudios serios han demostrado que esta práctica no solo puede ayudar a perder peso, sino también a vivir más tiempo. Habla con tu médico o un nutriólogo para averiguar cuál es el rango seguro para ti.
Aunado a esto es buena idea incorporar más movimiento en tu día. Sube más escaleras, camina cada vez que puedas, haz abdominales o ve a una clase de yoga tres veces por semana. Hacer ejercicio es seguro y saludable y no solo ayuda a perder peso, sino que también mantiene al cuerpo y a la mente más saludables en el largo plazo.