El estudio, para llegar a dicha conclusión, recluyó de forma aleatoria a decenas de miles de mujeres adultas, a las cuales se les pidió que un cuestionario que incluía preguntas referentes a su dieta.
Una vez terminado el primer proceso de la pesquisa se procedió a dar seguimiento a los individuos que duró aproximadamente 15 años, período durante el cual se registraron problemas cardíacos en el 3 pro ciento de los individuos. Con el fin de encontrar un patrón en dichos accidentes cardiovasculares, se eliminaron de la muestra variables que podían afectar los resultados y encontraron que el aumento de proteína en la dieta y la disminución de carbohidratos parecía tener un impacto.
Aunque los resultados mostraron una relación obvia entre un mayor consumo de proteína y problemas en el corazón, los expertos no pueden concluir el estudio de forma categórica, ya que existen otros estudios realizados con anterioridad que muestran exactamente lo contrario: enfermedades cardiovasculares relacionadas a un consumo menor de proteína.
Al parecer hay uno o algunas variables que no se están tomando en cuenta y que están contaminando los resultados. Los investigadores comentan que será necesaria más información para poner luz en el asunto. Por lo pronto, continúan, si deseas bajar de peso lo mejor es reducir un poco las proporciones y aumentar la actividad física.