Uno de los temas principales fue cómo medir la felicidad. Si bien algunos expertos afirman que hay muchas formas de medir la felicidad, como dar seguimiento al estado emocional de un individuo, a la satisfacción que siente frente a la vida o al estar saludable y en buena forma física, otros dicen que realmente no se puede medir, pero puede verse.
Si bien el dinero juega un papel importante para muchos, una vez que se tiene lo suficiente para mantener su estilo de vida, este pasa a segundo término. En muchos casos, los amigos y una familia funcional son más importantes y para muchas de las personas, un trabajo que tenga un valor creativo es necesario también para encontrar la felicidad.
Los estudios también han encontrado que existe una conexión entre la felicidad y la salud, y es que en general, las personas más felices, tienen una mejor salud y su sistema inmunológico funciona mejor, en cierta medida, por no encontrarse estresado. Además, las personas más felices pueden vivir más y disfrutar de su felicidad. De hecho, los datos también sugieren que quienes ríen mucho, tienen buen sentido del humor y suelen estar de buenas son más felices.
¿Hay alguna forma de aprender a ser feliz o a mejorar en este aspecto? Algunos expertos dicen que si las personas agradecen diariamente por lo que tienen o participar en conversaciones informativas pueden contribuir a una mayor satisfacción y felicidad y obtener resultados sorprendentes. No debería sorprendernos tampoco que para la gente tener una buena relación amorosa es un factor importante para lograr este objetivo.
Los informes de estudios y observaciones en este tema, aseguran que, si una persona tiene cerca a un miembro de su familia o un amigo que esté feliz, es probable que se contagie con esta sensación positiva y sienta un gran cambio.