Se ha demostrado que las dietas basadas en vegetales reducen el riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y ciertos tipos de cáncer, según la Facultad de una universidad europea.
Este estudio se suma al creciente cuerpo de evidencia de que las fuentes de nutrición basadas en plantas deberían constituir el grueso de nuestras dietas, señaló el experto encargado del estudio.
Los pacientes buscaron evitar la mayor cantidad de alimentos procesados y empaquetados, que tienden a ser altos en sal, azúcar y grasa saturada, así como productos animales, sobre todo carnes procesadas, además de comer más fibra, ya que esto reduce naturalmente los niveles de colesterol, continúa el científico.
Aumentar la ingesta de fibra soluble, como la avena, los frijoles y lentejas, el brócoli, las manzanas, las peras y en general la mayoría de las verduras y frutas, son importantes para reducir la absorción del colesterol de los alimentos, agrega.
Nuestra comprensión del colesterol y las enfermedades cardíacas aún está evolucionando. Aunque todavía necesitamos muchas investigaciones para comprender plenamente cómo afecta el colesterol a nuestra salud, este estudio apoya el hecho de que la gente debería abstenerse de comer grasas saturadas, independientemente de su procedencia.