Un estudio publicado en una revista europea revela que los adolescentes que se duermen y se despiertan tarde son más propensos a sufrir asma y alergias que los que se acuestan temprano. Pero, ¿cuál es la relación entre el sueño y el asma?

El asma y las enfermedades alérgicas son comunes en niños y adolescentes de todo el mundo, y su prevalencia también va en aumento. Se conocen algunas de las razones de este fenómeno, como la exposición a la contaminación y al humo del tabaco, pero todavía hay mucho que comprobar.

Un estudio encontró datos sugerentes increíbles en un análisis hecho a más de 1,500 adolescentes de entre 13 y 14 años, en el cual se les pedía a los participantes que compartieran sus experiencias con el asma, los mocos, los estornudos y sus hábitos de sueño.

Los niños que se quedaban despiertos y se acostaban más tarde tenían tres veces más probabilidades de padecer asma y dos veces más de sufrir rinitis alérgica que los que se acostaban más temprano. Los datos sugieren que existe una relación entre la hora de irse a la cama, el asma y las alergias en los adolescentes.

Se necesitan más investigaciones para confirmar si quedarse despierto hasta tarde provoca asma, pero los expertos creen que esto sucede porque la alteración de la hormona natural del sueño del cuerpo, la melatonina, puede desencadenar una respuesta alérgica.