Este asunto es algo con lo que muchas personas se enfrentan. Puede ser causado por una carga de trabajo excesiva, falta de control, falta de apoyo en el lugar de trabajo y otros factores. Esta afección no solo puede afectar negativamente a la salud mental y física de una persona, sino que también a la calidad de lo que hacemos y la productividad en general.
Afortunadamente, hay varias formas de ayudar para que no se produzca. Por ejemplo podemos establecer límites, o sea aprender a decir no cuando sea necesario y tener un calendario claro con su tiempo y esfuerzo. Tambieén podemos hacer ejercicio regularmente para ayudar a reducir el estrés y mejorar el bienestar general.
Otra buena idea es practicar respiración profunda para reducir la tensión en el cuerpo y la mente y al mismo tiempo tomarse un tiempo para descansar y relajarse durante el día no solo para tranquilizarse sino también para mejorar la productividad. Mantener una buena postura también es una buena idea. Así reducimos la tensión en el cuerpo y promovemos una sensación de bienestar.
Al momento de Establecer metas, es importante ser realista y para no frustrarnos si no las alcanzamos. Estas deberían ser alcanzables de esa forma nos aseguramos que, aunque vamos poco a poco, también ganamos seguridad.
Hablar con alguien de confianza para dar salida a las preocupaciones y sentimientos puede ayudar bastante también, así como mantener una alimentación saludable y dormir lo suficiente. De hecho, una buena noche de sueño es uno de los mejores trucos para estar sano.
Además de lo anterior podemos considerar prácticas de meditación. Esta es muy buena ayuda no solo para reducir el estrés mejorar sino también para tener una mente clara y mejorar la concentración.