Pero como adultos, a veces olvidamos lo importante que es el agua para nuestra salud. Por nombrar sólo algunas de sus funciones, el agua mantiene regulada nuestra temperatura, protege los tejidos sensibles y nos ayuda a eliminar los residuos.
Durante la mayor parte del año, necesitamos más o menos la misma cantidad de agua al día, que equivale a la cantidad de 2 litros, pero ¿cuánto debemos aumentar esa cantidad en el caluroso y sudoroso verano? Si vive en un lugar donde hace mucho calor en los meses de junio/julio/agosto, es casi seguro que el sudor sea un factor a considerar.
Por esa razón, como se suda más en verano, también se pierden más líquidos con mayor rapidez, lo que aumenta la necesidad de ingerir más agua. La buena noticia es que, es más fácil beber más agua en verano ya que se nota muy fácilmente la necesidad de tomar más agua.
Dicho esto, no es tan sencillo como beber una tonelada de agua durante los meses de verano y olvidarse de la hidratación durante el invierno. Es importante mantener la ingesta de agua a un nivel constante independientemente del clima. En general, la ingesta de agua debe ser de unos 2 litros diarios, pero dependiendo de los niveles de actividad, el peso, la altura y el sexo, podría ser un poco más", explicó.
La mayor parte del tiempo, es el mismo cuerpo quien nos pide la cantidad de agua que necesita, pero si te cuesta identificarla, reparte vasos a lo largo del día hasta que logres un promedio de 2 litros. Ya verás que en verano la cantidad probablemente te parezca poca.