Es medianoche y no puedes dejar tu dispositivo. Te desplazas por las interminables publicaciones de noticias malas y aún peores, deseando un rayo de esperanza para poder dormir por fin. Esta práctica ha sido bautizada como “doomsurfing” o “doomscrolling”. Se llame como se llame, los expertos advierten que puede ser perjudicial para la salud mental.

Para dejar de lado esta práctica, para empezar, debemos darnos cuenta de que estamos siendo absorbidos por esta ella. Nuestras mentes están hechas para buscar amenazas de supervivencia, pero el estado actual de las cosas ofrece una madriguera de preocupaciones sin límites a través de nuestros dispositivos. Aunque no todo el consumo de noticias es perjudicial, hay que prestar atención al efecto que tiene sobre uno, especialmente antes de acostarse.

También es importante limitar la exposición a estas noticias. Controlar el uso de las redes sociales con una aplicación de productividad podría ser una buena forma de empezar. Otras podrían ser desactivar las notificaciones, elimine las aplicaciones tóxicas y tener momentos del día libres de dispositivos.

Además, podemos controlar el acceso al dispositivo no teniéndolo siempre a la mano. Ten cuidado si tienes que ver los mensajes de texto porque es demasiado fácil empezar a mirar otros contenidos. Considera la posibilidad de hacer una pausa autoimpuesta de los sitios web incendiarios, las cuentas de redes sociales o tu dispositivo.

Podemos sustituir el doomscrolling por un comportamiento saludable como leer un libro, hacer rompecabezas, jugar algún juego de mesa, salir a caminar, a correr, limpiar la casa, prepara un té, escribir un diario, llamar a tus amigos o familia. Y si vital pasar tiempo en el teléfono, termina el día con vídeos de gatitos o cachorros o cualquier otra cosa que te ponga de buen humor.