Precalienta el horno a 200 grados C.
Mezcla la salsa de ostras, la mostaza de Dijon, la salsa hoisin, el jengibre, la miel y la salsa de soja en un tazón hasta que se mezclen y agrega las cebollas verdes. Unta aproximadamente 1/4 de la mezcla en el fondo de un molde para hornear. Forma una sola capa de chuletas sobre la mezcla, y vierte el resto de la salsa.
Hornéalas hasta que ya no estén rosa en el centro y los jugos salgan claros, o aproximadamente de 30 a 40 minutos.
Vierte los jugos del molde en un cazo. Y hornea las chuletas hasta que se caramelizen o por 1 o 2 minutos más.
Mezcla la maicena con el agua en un recipiente pequeño y agrégala después a la mezcla que reservaste en el cazo. Pon esa mezcla a fuego medio y revuelve constantemente hasta que espese. Sazona al gusto con sal y pimienta negra. Sirve en un plato las chuletas y vierte un poco de salsa sobre ellas.