Antes de empezar debemos preparar el suero de leche o buttermilk. Como no se puede conseguir en México debemos ingeniárnosla para prepararlo y aunque no es exactamente lo mismo el sabor es muy parecido. Para hacerlo simplemente ponemos en recipiente la taza de leche entera y agregamos el jugo de limón. Dejamos reposar por 5 o 10 minutos y listo.
El resto de la receta también es muy sencillo, simplemente incorporamos en un vaso de licuadora, el queso crema la mantequilla, el azúcar, el suero de leche, el huevo y las galletas María y licuamos bien.
En un recipiente grande, ponemos la harina y agregamos el polvo para hornear. Integramos los ingrediente muy bien y añadimos la mezcla líquida y batimos muy bien con un globo o una batidora eléctrica.
En un sartén derretimos un poco de mantequilla y dejamos calentar el sartén a fuego medio. Es importante no subir mucho la flama porque si lo hacemos los hotcakes se nos van a quemar por fuera y el interior quedará crudo. Tienes que ser paciente en este paso.
Una vez que empiecen a salir burbujitas en el hotcake ya puedes voltearlo. Sirve con miel de maple.