En una olla onda calentamos un chorrito de aceite de oliva y agregamos 40 gramos de mantequilla. Derretimos bien, incorporamos las cebollas y bajamos el fuego a bajo. Salpimentamos, mezclamos muy bien, sofreímos por alrededor de 20 minutos y revolvemos ocasionalmente.
Pasado el tiempo, agregamos la harina, mezclamos bien y dejamos calentando otros 2 minutos. Añadimos el consomé, volvemos a mezclar y rectificamos el sazón.
Untamos de mantequilla las dos caras de las rodajas de baguette, las colocamos en una bandeja para hornear forrada en papel encerado, las metemos al horno precalentado a 200 grados centígrados. Un minuto antes de que esté listo, saca los panes y agrega queso encima para que se gratine. Una vez que esté derretido el queso y el pan un poco dorado, las sacamos.
El último paso requiere platos para horno, pues hay que gratinar el queso, pero vamos a hacerlo de otra manera. Servimos en un plato un poco de sopa muy caliente, de preferencia que este hirviendo, colocamos dos rebanadas de pan en la superficie y espolvoreamos queso para derretir. Tapa con otro plato y espera a que el queso gratine.