Para hacer la salsa de chile colorado necesitamos tener los chiles abiertos, y previamente hidratados o ablandados. En una licuadora agregamos los chiles y un poco del agua donde se hidrataron, sal al gusto, un poco de cebolla, la cucharadita de orégano y licuamos hasta lograr una mezcla homogénea. Rectificamos de sal, lo colamos y reservamos.
En una olla ponemos a hervir en dos tazas de agua los ejotes previamente lavados y troceados con un pedacito de cebolla y un poco de sal. Los dejamos por alrededor de 12 minutos o hasta que se ablanden y una vez listos los escurrimos y reservamos.
En un recipiente grande vertemos los ejotes, la harina y mezclamos bien hasta que se integren. Agregamos el huevo previamente batido y volvemos a mezclan hasta lograr una mezcla pegajosa. Formamos tortitas del tamaño de una palma y reservamos.
En un sartén caliente con suficiente aceite ponemos a freír las tortitas y cuando tengan un color dorado las sacamos del fuego. En otro sartén caliente agregamos el chile colorado y dejamos que hierva. Una vez hirviendo vamos sumergiendo las tortitas y las dejamos por aproximadamente 5 minutos. Retiramos del fuego y servimos con un poco de chile.